Dos semanas tomó formalizar la vuelta de la IndyCar Series al Watkins Glen International.

Así lo aseguraron Jay Frye, Director Deportivo y de Competición de la categoría, y Michael Printup, presidente del autódromo localizado en Nueva York, el viernes pasado en conferencia de prensa, y destacaron que a pesar de que el objetivo era llegar a un acuerdo en 2017, el esfuerzo de ambas partes, junto con el del gobierno local, fueron claves para comenzar a organizar la carrera del próximo 4 de septiembre en tan poco tiempo.

«Recibimos noticias de que algo estaba pasando (en Boston), y eso pudo ser alrededor de las 5 PM, y para las 5:01 estaba hablando con este hombre (Printup) por teléfono, y desde ahí cobró vida por sí mismo», compartió Frye.

«Ciertamente hubo gran interés de parte suya, gran interés de parte nuestra. Pensábamos más en 2017, pero obviamente estamos un año adelante».

Printup, quien asistió este año a la competencia de Phoenix para conversar con los dirigentes de la categoría, ha tenido un año bastante ocupado, en especial por la repavimentación que atravesó la pista y la serie de tests que tanto NASCAR como IMSA han llevado a cabo a lo largo del mes, por lo que la oportunidad de promocionar el circuito en esta nueva etapa en diversas modalidades de carreras no pudo ser mejor.

«Fue una repavimentación de alrededor de 11 millones de dólares», aseguró. «La pista es la misma. Tuvimos a pilotos probando de IMSA, algunos de los pilotos de NASCAR, pero los muchachos de IMS dijeron que es justo como suponía ser, a excepción que hay mucho grip. Tuvieron que colocar goma en un par de días, pero después de eso dijeron que fue increíble, entonces es fantástico».

Printup también reveló que se han mejorado diversas zonas del circuito en términos de seguridad, como más «pianitos» en las «esses» y la zona de la «Bota».

«Charlie Whiting (quien refrendó el certificado Grado 2 de FIA) aprobó todo en nuestra inspección hace dos meses, entonces desde el punto de vista de seguridad, hemos hecho eso, hemos agregado más alambrado y agregado salidas de emergencia en cada curva. La zona de grava no está completamente pavimentada. La curva 8 está terminada, la 10 la tiene, obviamente la zona del Bus Top está reelaborada», describió.

Los boletos para el evento comenzarán a venderse desde este miércoles; entre los asuntos pendientes es si habrá algún descuento o preferencia para la gente que había comprado entradas para el evento fallido en Boston; ambos lugares están a alrededor de 640 km de separación.

En cuanto a la actividad en pista, habrá de definirse si habrá un Promoter Test el día jueves, para tener tres días de prácticas oficiales, o el viernes, para que la agenda quede en sábado y domingo. La Indy Lights, que también se había quedado con una vacante en el calendario, también visitará el trazado. 

Pero en general, la reacción entre pilotos y equipos ha sido positiva, por lo que los organizadores están entusiasmados para llevar a cabo la carrera.

«Hay que ver el éxito, hay que ganarlo. Nosotros sabemos que tenemos que ganar», expresó Printup.