Alexander Rossi aplaudió el esfuerzo de Andretti Autosport para reparar su auto justo a tiempo para la calificación del GP de Alabama de IndyCar.
El californiano dañó la parte trasera de su No. 27 durante el entrenamiento matutino de este sábado, poco menos de tres horas antes de la calificación en una de las pistas más difíciles para avanzar posiciones.
Por prevención se reemplazó el motor del monoplaza, además de que hubo muchas piezas que se repararon en alrededor de dos horas. Integrantes de los cuatro autos de la escuadra de Michael Andretti y de Honda trabajaron sin parar.
Así fue como quedó listo justo antes de comenzar la calificación que Rossi no sólo tomó parte de la sesión que ordenó la parrilla, sino que a pesar de no rodar con el neumático suave, se metió al Fast Six y aseguró la quinta posición de salida.
«Fue increíble», expresó tras la calificación. «Creo que fueron seis de los muchachos involucrados, la gerencia involucrada. Fue una gran, gran situación hacer un (cambio de) motor y una (reparación de) caja de cambios. Entonces, sí, los puse en una situación muy difícil».
«Fue asombroso estar ahí en primer lugar, tener la oportunidad de competir y calificar. Obviamente sabíamos que el auto había estado fuerte todo el fin de semana. No tuvimos oportunidad con los neumáticos rojos, por lo que la primera salida fue un poco de adivinar».
«Quedé complacido de estar ahí. Obviamente cuando avanzas hasta el (segmento) final, esperas un poco más. En última instancia, por donde estábamos hace dos horas, creo que todos están aliviados y felices de que hayamos superado eso. Seguro que todos los resultados que conseguimos este fin de semana se deben a ellos».
Ahora, Rossi piensa en tomar revancha del año pasado, cuando no logró capitalizar su segunda posición de salida y, por una mala estrategia, se conformó con la quinta plaza.
En el proceso, acabó como el mejor del cuarteto de Andretti, luego de que Romain Grosjean y Colton Herta fueran perjudicados por la bandera roja que generó el despiste de Marcus Ericsson en el Fast 12 y se conformaran con los lugares 8 y 10, respectivamente.
En la rueda de prensa, Rossi compartió que el tiempo que pasó en la zona de garajes, viendo los trabajos de reconstrucción de su máquina, no fueron otra prueba psicológica a nivel personal, al tener confianza plena en que el trabajo se haría.
«Nunca tuve dudas de que lo lograrían», afirmó. «Era sólo cuestión de cuánto podríamos afinarlo. Pero he pilotado para este equipo durante seis años».
«Hemos tenido daños por choques o incidentes o problemas mecánicos o lo que sea, y nunca nos hemos perdido una sesión. Esos muchachos son fenomenales al poder diagnosticar un problema y solucionarlo».
«Nunca tuve dudas. Para mí, todo ese tiempo se centró en la clasificación, hablar con mis compañeros de equipo, hablar con los otros ingenieros para tener una idea de lo que sentían con los neumáticos alternativos y luego aplicarlo lo mejor que pude cuando salimos».
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