Callum Ilott corrigió a tiempo su estrategia para entregarle a Juncos Hollinger Racing su primer Top 10 en la serie IndyCar.
El británico mostró velocidad durante la jornada de este sábado en el circuito mixto de Indianápolis, al mantenerse en el Top 15 en condiciones de piso seco y esquivar los incidentes a su alrededor para subir a la sexta posición.
Sin embargo, en el momento de decisión de la última detención masiva en pits, Ilott fue uno de los cuatro pilotos que se quedó con neumáticos para piso seco, lo que a la postre le daría desventaja porque la lluvia se intensificó gradualmente.
El equipo No. 77 rectificó y mandó a su piloto a pits, perdiendo su ubicación en pista y reiniciando en 14º para los últimos 15 minutos de acción, mismos que aprovechó al máximo para cruzar la meta en séptimo.
«Fue una carrera con altibajos», dijo. «Al principio logré avanzar dentro del grupo y logré una buena corrida en las condiciones mixtas. Y después fuimos tarde con una de las decisiones que nos llevó al final por las (llantas de) mojado».
«Perdimos un par de lugares, pero nos la arreglamos para recuperar algunas. Y después no puedo decir nada más que no fuera supervivencia y mantenerme. En ese punto había tanta agua y spray por todos lados».
«Pero para Juncos Hollinger Racing y Chevy, un equipo con un auto, un resultado de Top 8 es una recompensa por esta carrera».
De esta forma, Ilott y el equipo Juncos se redimieron del 26º puesto conseguido hace dos semanas en Alabama, producto de un despiste del piloto de primer año mientras luchaba por posición con Helio Castroneves. Parte del resultado lo cimentaron el viernes, cuando calificaron en séptima casilla.
Además de ser su primer Top 10 en la categoría, es el mejor resultado de un novato en esta temporada hasta ahora, aún a pesar de que Christian Lundgaard le dio un golpe accidental – por falta de visibilidad – mientras cruzaban la meta final. El danés acabaría noveno.
IndyCar al Día 