En un momento crítico dentro de la búsqueda de la igualdad de género y justicia social, el proyecto de Beth Paretta podría marcar un parteaguas en el futuro a corto y mediano plazo de IndyCar.
En el Día Internacional de la Mujer, podríamos recordar los hitos femeninos en el automovilismo de fórmulas en Estados Unidos, en especial las “500 Millas de Indianápolis”, a lo largo de la historia.
Incluso, viendo más allá de las mujeres piloto, podemos destacar la presencia de gerentes/dueñas de equipo, mecánicas y responsables de programas de diferentes áreas.
Sin embargo, la serie de iniciativas que Roger Penske está impulsando desde hace casi un año, como el de Paretta, hacen que el enfoque no sólo se compare con el pasado, sino que se enfoque al futuro, con un impacto social más que por el hecho de estar en la parrilla.
«Últimamente se ha hablado mucho sobre la representación y eso es algo muy real», afirmó Paretta en enero, al presentar su proyecto para las «500 Millas de Indianápolis».
«Escuchamos sobre la importancia de los modelos a seguir, los ejemplos, los mentores, para que las personas tengan la oportunidad de verse a sí mismas en las mujeres en la parrilla y en pit lane».
«Cuando se anunció la (iniciativa) Race For Equality & Change, me sentí muy complacida. Esperaba que eso significara que había un compromiso e inversión reales en nuestro futuro colectivo, como fanáticos de las carreras, como corredores y como serie».
Paretta no solo entiende el negocio del automovilismo, sino también el de la industria, y todo lo que ocurre tras bambalinas.
Habiendo forjado su camino por cuenta propia, lideró programas deportivos de diversas marcas dentro del Grupo FCA, como SRT y Dodge, ganando el título de NASCAR Cup en 2012 con Penske y Brad Keselowski.
Hace cinco años, tenía la intención de abrir un programa para la 100º edición de la Indy 500, hasta que algunos “cambios en los términos” con el equipo con el que iba a asociarse en lo técnico la obligó a desistir del proyecto.
Hoy, además de formar Paretta Autosport, equipo mayoritariamente liderado por mujeres que tendrá a Simona de Silvestro como piloto en la Indy 500, busca promover la importancia de la educación en las generaciones femeninas nuevas, a fin de que se conviertan en mecánicas, ingenieras, pilotos y dueñas de equipo.
Del lado comercial también recibió ayuda de Penske, luego del anuncio de su primer patrocinador de hoy lunes. Además, opera su programa en talleres de Carolina del Norte, con asistencia del «Capitán». Tal como ella lo quería hacer hace un lustro, pero ahora tiene en sus manos un plan más consolidado.
«He trabajado con mujeres ingenieras que solo decidieron seguir el camino de la ingeniería después de ver a otra mujer en ese puesto. Yo misma soy culpable de eso», mencionó.
«Solo perseguí el trabajo como ejecutiva automotriz después de ver a otra mujer en un puesto que pensé que tal vez podría desempeñar algún día. A pesar de que he visto ejemplos de hombres en esos roles durante años».
«Pero el cambio está ocurriendo y hay un impulso en el que podemos crear oportunidades para las mujeres al destacar sus historias, porque la forma en que las personas se identifican y sienten una conexión con lo que ven es innata y nosotros no podemos cambiar eso, pero podemos cambiar el enfoque, podemos destacar a los miembros de este equipo y sus historias, lo que significan, lo que harán».
A lo largo del camino, Paretta ha destacado la participación femenina que IndyCar ha tenido en gran parte de su historia, en especial en la actualidad, en comparación con otras series, tomando en cuenta las áreas de ingeniería en equipos, relaciones públicas y socios como Firestone, algo que debe ser celebrado.
Sin embargo, en un ambiente dominado por hombres, todo tipo de circunstancias pueden ir en contra. Sea cual sea el resultado en Indianápolis, su meta es plantar esa semilla para que crezca a futuro, quizá para tener un auto de tiempo completo en 2022, sin cambiar los principios de su fundación.
De ahí la importancia y valor de que el proyecto surja en una época en la que las acciones necesitan ser más visibles que las buenas intenciones, en la que la diversidad se debe impulsar y la igualdad de género sea un valor genuino.
Los hechos sobre las palabras, una tendencia que ha caracterizado a la administración actual de la serie. Y en una sociedad que se busca que sus voces se escuchen, no hay mejor momento para que alzarla que hoy.
«Seamos claros. Hay mujeres en las carreras. Todas nos conocemos. Y en los últimos años ha habido algunos avances con programas para conseguir que más pilotos de carreras femeninas en la parrilla, de todas las alineaciones femeninas de manejo en autos deportivos, la Serie W, todos estos son grandes avances».
«Pero creemos que hay mucho más por hacer e incluso más oportunidades».
«Éste siempre ha sido un paddock acogedor, para mí y para otras mujeres. Pero ahora, bajo la dirección de Roger Penske y la administración aquí, se está fortaleciendo».