Felix Rosenqvist no tuvo un buen trato de parte de los superóvalos en su primer año en la IndyCar.

El sueco solo finalizó uno de los tres eventos en este tipo de pistas durante la campaña, Texas, en el que calificó 16°, corrió en la parte trasera del grupo durante todo el recorrido y finalizar 12°, a dos vueltas del ganador.

Dos accidentes perjudicaron su andar en las «500 Millas de Indianápolis»: uno fue en la calificación, lo que derivó en el 29° lugar de salida, y otro en la carrera, cuando no pudo evitar la colisión generada por Sébastien Bourdais y Graham Rahal mientras luchaba por regresar al Top 10, junto con Charlie Kimball y Zach Veach.

Llegó Pocono, en el que estuvo a medio auto de esquivar el contacto con Takuma Sato, pero terminó con un vuelco violento que, por un par de centímetros, estuvo a punto de atorarse en el alambrado, tal como ocurrió con Robert Wickens hace un año o con Mikhail Aleshin en Fontana, en 2014.

«Primero que todo, es bueno ver que estoy autorizado (para correr) después de las pruebas médicas», declaró el domingo, después de ser dado de alta de un hospital en Allentown, Pennsylvania.

“Solo tengo un leve dolor de espalda y un poco de dolor de cabeza. Espero volver a la normalidad en un par de días. Enorme agradecimiento al personal de pista y al personal médico de INDYCAR; hicieron un trabajo increíble al cuidar todo. Afortunadamente, los otros pilotos también están bien, lo que creo que es lo principal».

«Es una pena que hayamos quedado involucrados en el incidente en la primera vuelta. Creo que hoy tuvimos un buen (auto) NTT DATA Honda. Fue genial ver a Scott (Dixon) estar en el grupo líder todo el día. Miro con ansias volver al auto en Gateway”.

El auto del sueco, quien inició en noveno lugar, pegó en el muro externo a más de 200 millas por hora y se arrastró por la Barrera SAFER, con la parte delantera casi rozando el alambrado.

Al aterrizar en la pista, fue auxiliado por los oficiales de emergencia y salió por sus propios medios, pero por motivos de precaución, fue trasladado al hospital para someterse a más estudios, los cuales no mostraron lesiones significativas.

Pese al golpe, que marcó su tercer abandono de la campaña, Rosenqvist aún mantiene el liderato en la lucha por el «Novato del Año», aventajando a Santino Ferrucci por 13 puntos, a Colton Herta por 45 y a Marcus Ericsson por 67.