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FOTO: Chris Owens/INDYCAR |
La increíble victoria de Graham Rahal de la noche del sábado en el óvalo de Texas no solo significó el fin de una racha irregular de resultados en la temporada actual de la IndyCar Series, sino también una revancha personal de más de cuatro años de antigüedad.
El estadounidense, quien venció a James Hinchcliffe por ocho milésimas en la Firestone 600, perdió la edición de esta competencia en 2012, cuando era piloto de Chip Ganassi Racing, en la última vuelta, tras impactar con el muro de contención en el penúltimo giro, dejándole el primer sitio «en bandeja de plata» a Justin Wilson, para lo que sería su último triunfo en la categoría, antes de perecer en Pocono, Pennsylvania, hace un poco más de un año.
Por esta razón, no pudo ocultar su emoción al poder finiquitar, por fin, la victoria.
«Lo que me motivó un poco (en la carrera) es que me mantuve pensando en Justin, porque hace un par de años tuvimos una gran batalla aquí», compartió en conferencia de prensa.
«Nos quedamos cerca, y honestamente estaba recordándolo ese momento en las últimas dos vueltas, intentando lograr esto para nosotros aquí. Es un gran fin de semana para mí, obviamente mi esposa (Courtney Force) está aquí, lo cual es bonito. Ella no viene tan seguido, entonces fue divertido. Ella ha visto (en persona) Fontana y ésta, las dos carreras más electrizantes que puedes ver».
El líder de Rahal Letterman Lanigan Racing subió de noveno a séptimo en la clasificación general, siendo el mejor de los representantes de Honda por dos puntos sobre Hinchcliffe, aunque con opciones mínimas para ganar la corona; a pesar de que su año ha sido complicado, asegura que
«Hemos estado dentro del Top 10, pero nada ha sido fácil para nosotros, nada», aseguró. «Uno ve nuestra performance del fin de semana pasado (en Pocono, donde arrancó y terminó undécimo), no teníamos velocidad en recta, no pudimos descifrarlo en toda la semana, no averiguamos nada en el test. Estábamos frustrados».
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FOTO: Chris Owens/INDYCAR |
«Los muchachos mantuvieron la cabeza fría, siguieron trabajando duro, esto levantará su espíritu mucho, y espero que vayamos a Watkins Glen para tener una buena actuación. No quería irme este año sin victorias, y en esa última amarilla, me decía que esta podía ser mi oportunidad, que tenía que lograrlo, y fuimos afortunados de que todo resultó».
Rahal agradeció al público asistente a este día de actividades, así como al presidente del autódromo, Eddie Gossage, y denotó que el estilo de carrera que protagonizaron es totalmente diferente al visto en años anteriores.
«Fue un gran evento, muchas cosas pasaron… Vaya, cuatro ‘lado a lado’ y mucha locura», dijo. «Pero también es muy diferente a lo que solía ser. Ya no es más el ‘pack racing’ en el que ibas a fondo. Digo, estabas levantando mucho el pedal en el tráfico, pero la forma en la que los autos se succionan hoy en día, el draft es tan grande que hace que las carreras sean grandiosas».
Esta fue su cuarta victoria en la categoría y segunda en óvalos, además de que tanto para él como su equipo fue la primera visita al Círculo de Ganadores de Texas.
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