Conor Daly continúa disfrutando su momento en IndyCar, después de ser el piloto que más vueltas lideró en las «500 Millas de Indianápolis».
Por obvias razones, el estadounidense no escuchó los gritos de la multitud cuando tomó el primer lugar pasado el primer cuarto del recorrido, para estar al frente en un total de 40 giros.
Si bien tuvo mala fortuna cuando el neumático que se le desprendió a Graham Rahal cayó en su alerón delantero y desdibujó su puesta a punto, dejándolo 13º en el resultado, Daly está entusiasmado tanto por lo que viene en la temporada de IndyCar, dado el impulso que Ed Carpenter Racing forjó en mayo, como por la Indy 500 del año próximo.
«Honestamente que trato de verlo de manera bastante positiva. Nuestro increíble auto de carreras de la Indy 500 está en el taller. Todo lo que tienes que hacer es reemplazar el alerón delantero y estará listo el año que viene. Espero que para fin de año podamos volver a unir estas piezas», comentó este martes.
«Realmente disfruto trabajar con este equipo de carreras. Creo que han hecho un gran trabajo. Estamos en un gran lugar ahora. Obviamente, Ed (Carpenter) fue muy rápido. Rinus (VeeKay) fue muy rápido. Todo el mundo ha sido rápido. Eso es algo realmente alentador.
«Para mí, el objetivo es seguir ejecutando todos los fines de semana, sin cometer errores, y cuando lleguen los resultados, eso será producto de que todos nuestros muchachos estén haciendo el mejor trabajo que pueden hacer junto a mí haciendo el mejor trabajo que puedo hacer».

2021 es un año de continuidad para Daly y su grupo de trabajo, en el que han tenido mejoras en el entendimiento de los dos compuestos de neumáticos, además de la puesta a punto de sus autos en diferentes cargas de combustible.
De sus tres arranques con el No. 20, al que volverá este sábado y domingo, tiene dos calificaciones en el Top 10 (incluyendo un sexto lugar en el GP de Indy, su primera aparición en el Fast Six), aunque la suerte no le ha acompañado en las competencias, al ser 16º en Alabama y St. Petersburg, además de abandonar en el circuito mixto del Speedway.
Rumbo a Detroit, donde consiguió su único podio en la categoría en 2016, cuando era parte de Dale Coyne Racing, afirma que su nivel de confianza es tan alto como en la Indy 500 de 2019, cuando fue contendiente a la victoria con Andretti Autosport.
«Queremos conseguir trofeos. Queremos estar al frente. Creo que este equipo puede hacerlo. Creo que ese es nuestro objetivo ahora. Estoy emocionado por eso», compartió.
«Me encanta la pista. Me encanta el fin de semana de carreras. Creo que está muy bien hecho. Especialmente somos un equipo Chevy, muy emocionados de estar en su patio trasero, lo cual es realmente genial».
«Va a ser genial volver allí y romperla, ver qué podemos hacer. Con suerte, las cosas que aprendimos del GP de Indy, el progreso que hicimos con nuestro auto, se trasladen a Detroit».