
FOTO: Joe Skibinski/INDYCAR
Pasaron dos fechas en el campeonato de IndyCar y Alexander Rossi no pudo quedar en terreno más desventajoso.
El californiano, favorito para luchar por la Copa Astor, se ubica 23º en la puntuación general, con déficit de 86 unidades ante Scott Dixon, mientras la categoría se dirige al Gran Premio de Road America, sitio en el que dominó de manera aplastante el año pasado.
Para tener una idea, Ed Carpenter y Tony Kanaan, quienes solo corrieron en la apertura de campaña en Texas, tienen más puntos en su haber, además de que solo supera a Álex Palou entre los pilotos que compiten de tiempo completo.
En el GP de Indianápolis, el No. 27 sufrió interminables fallas de presión de combustible durante los dos días de actividad le hicieron perder tiempo en pista y, eventualmente, lo dejaron fuera de contienda.
“Perdimos potencia en ese reinicio (de la vuelta 46)”, dijo. “Creemos que fue el mismo problema de presión de combustible que tuvimos ayer. Pensamos que lo teníamos resuelto, pero claramente, no lo hicimos”.
“Creo que era un auto para Top 5. Es lamentable que hayamos tenido este tipo de fin de semana en dos carreras seguidas”.
Si bien los autos de Andretti Autosport han sido competitivos, los problemas de ejecución y confiabilidad han afectado a la agrupación en este arranque de campaña.
Zach Veach y Colton Herta lograron cuartos lugares en Texas e Indy, respectivamente, mientras el tripulante del No. 88 es el mejor ubicado en la puntuación, al ser quinto.
She’d like a chance at things. Maybe next weekend. pic.twitter.com/CSLWCcWzYw
— Alexander Rossi (@AlexanderRossi) July 4, 2020
En contraste, fallas en la central eléctrica en los autos de Rossi y Ryan Hunter-Reay los condenaron a finalizar octavo y 15º en Fort Worth. Para el No. 28, problemas en pits en Indy lo relegaron al final del grupo, por lo que solo pudo remontar a 15º.
Ni hablar de Marco Andretti, quien finalizó 14º en Texas y, con problemas de transmisión y golpes al muro, fue 22º el sábado pasado. James Hinchcliffe tampoco entró en ritmo por errores en pits, que lo dejaron 18º y 11º en sus dos apariciones con la escuadra.
Además, Rossi puntualizaba antes del comienzo de temporada que, si bien tener seis autos en pista podían beneficiar en la acumulación de información, este mismo factor podía resultar contraproducente.
“Creo que la forma en que el equipo se ha estructurado esta temporada baja es realmente muy buena, y tengo una gran confianza en nuestra capacidad para procesar esa información”, explicó el mes pasado.
“Pero tenemos que tener eso en cuenta, especialmente en eventos acortados cuando vuelves para tener un debrief, tienes cinco opiniones volando y no tienes mucho tiempo para tomar la decisión, tienes que pasar categóricamente por las cosas y poder procesar la información que puedes usar para ti y la que no”.
“Es una ventaja si lo hacemos correctamente, lo cual creo que en los últimos años el equipo se ha expandido y estamos preparados para ello, así que estoy deseando que llegue”.
“Pero en términos de que no hay pruebas, no creo que tener más autos sea una ventaja en absoluto. Hay muchos otros equipos que han tenido bastantes días y vueltas más (de ensayos) de los que hemos tenido hasta este momento”.
Al no haber puntuación doble para la final en St. Petersburg, una actuación buena en los siguientes dos fines de semana, en los que habrá fechas dobles, serán determinantes para las opciones de título para Rossi en 2020.