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FOTO: Joe Skibinski/INDYCAR |
Siete días después de verse afectado por las banderas amarillas, a Helio Castroneves le beneficiaron en esta ocasión.
El piloto brasileño completó el 1-2 en la Fecha 11 de la IndyCar, disputada este domingo en Toronto, al salvar el día tras un problema con un neumático en el stint inicial y haberse detenido antes del accidente de Josef Newgarden; al llevar 25 vueltas con el compuesto rojo, su rueda delantera izquierda se pinchó en la Curva 1, lo que lo obligó a dar un giro entero a media velocidad.
“En un punto, entre yo y Scott la diferencia aumentó porque la (llanta) delantera empezó a rendirse. Fue muy extraño”, describió en conferencia de prensa. “Les dije que la vibración era muy, muy fuerte, pero manejable. Después de decir eso, a la vuelta siguiente, la delantera izquierda se desinfló”.
“Por desgracia, fue en la curva 1. Si hubiera sabido, obviamente hubiera parado. Es muy inusual que una situación de este tipo pasara, entendiendo cómo la pista se estaba desquebrajando en la curva 5, pienso que probablemente fue una de las causas que terminaron por cortar la llanta”.
No obstante, esto ocurrió mientras las primeras detenciones se llevaban a cabo, además de que para ese momento había establecido una amplia ventaja sobre sus rivales, por lo que salió en el sexto lugar.
Posteriormente, adelantó su segundo servicio en dos vueltas comparado con su coequipero en Team Penske, y eventual ganador, Will Power, por lo que tras la aparición del Safety Car, aunque no tuvo auto ni “Push-To-Passes” suficientes para atacar al australiano, pudo rebasar a James Hinchcliffe y esperó la detención de Tony Kanaan para colocarse segundo, siendo el podium No. 89 de su trayectoria y tercero de 2016.
Esto fue un giro de 180° respecto a la competencia de Iowa, donde dos banderas amarillas lo dejaron vueltas abajo.
“Helinho” hizo una comparación de dicha situación con la de Scott Dixon, líder en 56 de las 85 vueltas pero quien resultó afectado por el golpe de Newgarden en términos de estrategia.
“Es frustrante”, afirmó. “Incluso yo sé que hoy Scott era rápido. Mi auto era rápido también, Es un poco frustrante. ¿Qué es lo que uno podía hacer?”
“Por eso es que la IndyCar Series es muy competitiva. A veces, el auto más rápido no gana la carrera. Hace que el nivel de todos mejore (…). Un día irá todo de tu lado, otro día no. Sólo hay que seguir empujando”.
Castroneves reconoce que Power tiene la suerte a su favor, luego de ganar tres de sus últimas cuatro competencias; aunque mantuvo el discurso de la importancia del trabajo en equipo, en lo personal sabe que tiene trabajo por hacer, si quiere vencerlo a él y a Simon Pagenaud.
“Es bueno para el equipo. Es un gran esfuerzo. Hay que seguir fuertes, nos seguimos empujando uno al otro. Queremos traer este campeonato al Sr. Penske”, expresó.
El tricampeón en Indianapolis es tercero en el certamen, a 74 puntos del liderato del francés.