Colaboración de Fernando A. Alonso (@fdoalonso en Twitter)
De candidatos para ganar la 107˚ edición de las «500 Millas de Indianápolis» se maneja de una decena de pilotos.
Pero hay otro título que se disputará a la par este próximo domingo: el mejor novato de la competencia, donde Agustín Canapino parece tener a un rival que confunde a más de uno al revisar su contexto.
Benjamin Pedersen es una de las historias notables del mes, al estar encantado con el desempeño de su auto, el trabajo de su agrupación No. 55 de AJ Foyt Racing, escuadra que contrató al veterano Michael Cannon y en la cual hasta Santino Ferrucci sueña con la oportunidad de ganar.
Es el novato más rápido en calificar para la Indy 500, luego de establecer un promedio de vuelta de 233.297 mph.
«Muy afortunado con estar en esta posición con un auto tan bueno», le declaraba a IndyCar al Día tras su única salida a pista en la calificación del sábado, antes de amarrar el 11˚ sitio de partida.
«El equipo ha estado atento con todos los ajustes que se necesitan hacer para que encajaran con las condiciones en el último par de días. Me siento muy afortunado y me quito el sombrero a todos».
«Lo estoy arropando. Sientes la energía, pero honestamente sabía del auto que teníamos».
Pedersen es uno de los conductores que procede del programa de desarrollo que se conocía como “Road to Indy” y su trayectoria incluye pasos por Fórmula 4 y Fórmula 3 en su variante estadounidense. En este último fue subcampeón en 2019, pese a perderse dos citas triples.
Después continuó en otros certámenes europeos, pero alejado de la lucha por el título. En 2021 regresó a tiempo completo a la entonces Indy Lights, concluyendo cuarto; repitió en el siguiente año dentro del equipo HMD, siendo la victoria en Portland el único punto positivo.
Curiosamente, Pedersen fue quien dio el salto a INDYCAR este año, con muchos cuestionamientos sobre su capacidad para obtener resultados, pero con un patrocinio lo suficientemente robusto para asegurarle el asiento. El oriundo de Dinamarca sufrió en el arranque del calendario con un abandono y tres carreras terminando en la zona baja de la tabla, lo ponen como el novato con menos puntos.

Entonces… ¿dónde esta eso que lo hace contendiente para ser el debutante con mejor desempeño en la carrera? En la primera cita oval del año, Texas, calificó 13˚, un lugar arriba de su compañero de equipo Santino Ferrucci. En la competencia estuvo manteniendo su puesto, hasta que un problema mecánico lo retrasó un par de sitios.
Ahora la agrupación de Foyt de la mano de Cannon, han puesto en pista un auto muy competitivo que cimentó las dos apariciones de sus pilotos en el Fast 12 de calificación. Un salto inimaginable incluso después de que Cannon fuera anunciado en pleno mes de enero.
Además, Pedersen tiene más experiencia en óvalos al haber corrido en Iowa y Gateway (donde obtuvo tres podios) en Indy Lights, esto le permitirían tener un conocimiento superior en los procesos y estrategia contra el piloto de Juncos Hollinger Racing.
«Cuando hice mi primera carrera en Texas y la primera vez en la pista, creo que fue como a 225 (mph). Entré y me dijeron, ‘¿cómo se sintió?’, y yo dije ‘se sintió bien’. Y dijeron, ‘ibas a 225’, y yo dije, ‘¿en serio?'», compartió Benjamin en el Día de Medios. «Estaba un poco decepcionado y es lo mismo aquí».
«Tan pronto como aumentamos el impulso, podías sentirlo en Fast Friday, pero nunca he tenido una sensación en este auto, y tal vez sea porque tiene mucho agarre, dije: ‘Santo Dios, se está moviendo'».
«No he experimentado eso una vez. Así que sí, lo encuentro muy natural, las carreras en óvalo se basan mucho en las sensaciones y soy un piloto muy orientado a las sensaciones. Más que la mayoría de la gente. Entonces, tiene sentido para mí”.
Pese a que Pedersen luce sólido, tanto en el Día de Medios como en Carb Day, los pilotos reiteraron el asombro a la adaptación de Agustín, tanto en la temporada de IndyCar como en las prácticas de las 500 millas luego de marcar el sexto mejor registro en la última práctica.
Su humildad para aprender y trabajo duro, han dejado ya una huella en el paddock de la serie norteamericana. Entre las ventajas del argentino, quien arrancará en 27˚ se encuentra su capacidad de sortear el tráfico, además de la paciencia para ejecutar rebases que se le vio en el Turismo Carrera, motivo por el cual los pilotos lo han destacado reiteradamente.
«Estaba bastante arriba en esta sesión, pero se veía bien», mencionó Colton Herta en este viernes de Carb Day.
«Creo que todavía le queda un poco por aprender siguiéndolo y otras cosas sobre sus huecos y su tiempo, pero parece que tiene un coche rápido. Creo que si puede hacer algunos ajustes en la conducción, podría ser realmente bueno para él».
Algunos dicen que la pista elige a sus ganadores, por lo que ella tendrá la última palabra, pues tampoco hay que olvidar que RC Enerson, en el debut de Abel Motorsports, y Sting Ray Robb, quien sufrió para calificar al evento, también están en la lucha, aunque con una cuesta más pronunciada por superar.