Los pilotos de Team Penske han tenido un inicio particular de temporada en IndyCar, pero esperan que el 1-3 en Barber Motorsports Park los impulse a recuperar la relevancia en las «500 Millas de Indianápolis».

Desde la victoria de Simon Pagenaud en la edición de 2019, ninguno de los integrantes del equipo han vuelto a ser contendientes por el triunfo en el clásico del Memorial Day, ante el dominio de Chip Ganassi Racing, la consolidación de Arrow McLaren y los destellos de Andretti Autosport, Rahal Letterman Lanigan y Meyer Shank Racing.

Josef Newgarden finalizó quinto en 2020 y Pagenaud remontó desde el fondo de la parrilla para rescatar el tercer sitio en la última vuelta en 2021, año en el que Will Power sufrió para calificar. Scott McLaughlin fue 20˚ hace un par de años y chocó en la edición más reciente, misma en la que ninguno de sus autos alcanzaron el Top 10.

Después de la victoria de McLaughlin y la tercera posición de Power en Alabama, junto con el triunfo de Newgarden en Texas, la misión principal de la agrupación es consolidar consistencia para resolver el problema que ha implicado ser competitivos en el Speedway.

«Es el producto de INDYCAR. Juegas tus cartas como te las repartan», declaró McLaughlin tras ganar en la fecha pasada.

«Podría haber sido de dos paradas o de tres paradas como lo hicimos nosotros. Pensamos que era tres detenciones era la forma correcta. Tenemos la oportunidad como serie de cambiar eso. Es por eso que lo hace tan emocionante».

«Creo que la adición del push-to-pass, hay cosas que suceden, es algo bueno. Es un producto de carreras muy bueno. No sé cómo explicarlo. Creo que tenemos mucha suerte con el nivel de los pilotos, con lo duro que podemos competir con los autos. Los autos son muy fuertes.

«La diferencia de compuestos. Los neumáticos son realmente buenos. Firestone construyó un neumático realmente bueno que es capaz de competir en condiciones difíciles todo el tiempo:.

«No se trata de ganar todas las carreras en esta serie, se trata simplemente de ser consistente en el campeonato. Ese es exactamente nuestro objetivo desde el principio».

Consistencia no es algo que caracterice a la tripleta de Penske en este arranque de año. Aunque McLaughlin es cuarto en el ranking general, su accidente con Romain Grosjean en St. Petersburg y una actuación discreta en Texas le privaron de mantener el impulso con el que cerró la campaña anterior.

Mientras tanto, Newgarden tuvo un problema de motor en la Fecha 1, un error de estrategia en Long Beach y un incidente con Felix Rosenqvist en Alabama que perjudicó a su auto en la segunda mitad del recorrido.

Power, por su parte, chocó con Colton Herta en St. Petersburg, una sanción y una baja dramática en performance en Fort Worth, pero el sexto sitio en las calles californianas y el podio de tercer lugar en Alabama lo tienen satisfecho de su rendimiento al momento, al mantener la filosofía que lo llevó al título en el certamen pasado.

«Hubiera sido feliz si hubiera terminado quinto o sexto, incluso octavo, la verdad. Hay días que es un mal día que te atrapa», dijo.

«Diría que al comienzo de mi temporada, ha sido bastante bueno. No diría que es un mal comienzo en absoluto. He estado contento con todos los resultados excepto con uno, que fue Texas. No puedes ganarlas todas. De hecho, es muy difícil ganar una o dos en una temporada. Sólo hay que seguir acumulando buenos finales».

«Indy es un animal muy, muy diferente en términos de las 500. Obviamente, tienes el Gran Premio antes de eso. Pero sí, la 500 es un evento muy independiente, duro y único. Esperamos estar en el juego este año».

«Hemos estado bastante decepcionados con el rendimiento de los últimos años. Esperaremos y veremos. No dices nada. Hemos hecho mucho trabajo».