Will Power tuvo una temporada baja bastante complicada, pero está listo para volver a la carga y defender su título en la serie IndyCar en 2023.
El australiano se recuperó de fracturas que sufrió en algunas costillas durante el otoño, mientras participaba en una competencia de karting, una disciplina que practica con mucha frecuencia, en especial ante las limitaciones de pruebas para los equipos de la categoría de monoplazas. Se piensa que ocurrió en Go Pro Motorplex, kartódromo ubicado en Mooresville, Carolina del Norte.
Pero además, Power atendió en semanas recientes una situación relacionada con su esposa Liz, quien de acuerdo con Motorsport, tuvo complicaciones de una cirugía de espalda, a tal grado de que tuvo que cancelar su participación en las «24 Horas de Daytona», en la cual iba a correr un Mercedes AMG GT3 de SunEnergy1 en una de las clases GT.
Esta semana, el titular del No. 12 de Team Penske aseguró que la condición de Liz es «mucho mejor» que hace algunas semanas.
«Las últimas semanas han sido difíciles, permaneciendo en hospitales y trabajando en los problemas de salud que tiene mi esposa», mencionó.
«Así es la vida. Siempre podría ser peor. Las próximas cuatro o cinco semanas podemos llegar a un punto en el que ella se sienta segura».
Mientras termina de lidiar con este infortunio, Power se alista para buscar una nueva corona en la serie, después de un año en el que, pese a obtener una sola victoria, apeló a la consistencia durante el resto de la campaña y a un enfoque bastante particular, al no dar cabida a la oposición -incluyendo sus coequiperos- para realizar juegos psicológicos.
De manera particular, su discurso de pretemporada fue muy similar al de la segunda mitad de la campaña anterior, al mostrar su determinación a no cometer errores y ser inteligente en ciertos escenarios, aunque este año está dispuesto a ajustar la manera en la que los abordará, dependiendo del desarrollo del torneo.
«Enfoque similar, pero cada temporada tiene su flujo. A veces, nunca es lo mismo. A veces te encuentras con un tipo que se escapa (en los puntos) y tienes que ganar carreras en lugar de ser consistente. Sólo depende de cómo marche, y tienes que ajustarlo en consecuencia», explicó.
«Cada temporada fluye de manera diferente, pero en general en mi vida, simplemente no pongo demasiada emoción en las situaciones. No hay nada que ganar con eso»,
«Hay muchas cosas que encajaron el año pasado dentro de mi equipo, la tripulación. Obviamente, Dave Faustino y el nuevo jefe de equipo son un grupo bastante bueno, positivo, que disfruta el trabajo».
Power, el piloto con más pole positions en la historia de IndyCar, enfatizó en que, si bien la experiencia puede generar más comodidad al enfrentar circunstancias determinadas, dicha zona de confort nunca llega al 100%.
Del mismo modo, los logros de toda su trayectoria siguen siendo algo que no le causen satisfacción por mucho tiempo.
«Solo se trata de sacar el máximo partido de cada situación», comentó. ‘Nunca es como si tuviera que ser más agresivo. La situación siempre es diferente. Siempre son diferentes y requieren un enfoque diferente. Sólo tienes que volverte bueno leyendo eso».
«Honestamente, ni siquiera he pensado en el campeonato. Ni siquiera… casi me tienen que recordar que gané el campeonato. Más o menos lo hice, y sólo sé que ahora soy mayor, sigo adelante rápidamente y pienso en lo que sigue».