
FOTO: Chris Jones/INDYCAR Photography
Como lo demostraron en gran parte de la semana, los equipos Ed Carpenter Racing y Team Penske fueron la referencia en el primer día de calificaciones de las “500 Millas de Indianápolis”.
Spencer Pigot, quien fue el segundo en salir a pista, marcó el promedio más alto de velocidades, con promedio de 230.083 mph; si el “Fast Nine Shootout” de mañana se suspende a causa de la lluvia, automáticamente se quedará con la pole position para la carrera de la semana próxima.
El estadounidense tuvo como escoltas a Will Power y a Simon Pagenaud, quienes por momentos estuvieron cerca de arrebatarle los honores de ser el piloto más veloz del fin de semana. De hecho, el ganador defensor del evento casi iguala lo logrado por el ex campeón de Indy Lights, pero terminó con déficit de una milésima en los tiempos acumulados.
Josef Newgarden y Colton Herta, con el mejor Honda, completaron el Top 5, seguidos de los otros dos pilotos de ECR, Ed Jones y Ed Carpenter. El emiratense logró la mejor vuelta del día (38.958 s.) y se dirigía a desbancar a Pigot del primer sitio, pero eventualmente perdió cuatro décimas en sus dos giros finales, por lo que cayó a sexto.
Alexander Rossi y Sébastien Bourdais completaron la lista de posibles aspirantes a la pole position, en un día en el que se definieron los sitios 10 a 30 en la parrilla de salida, que incluyó varias sorpresas.
Marco Andretti y Conor Daly encabezaron este grupo, pese a que ambos salieron en ocasiones adicionales, junto con Helio Castroneves en 12º y Scott Dixon en 18º. Entre las sorpresas, a James Davison solo le bastó una salida a pista para asegurar el 15º puesto, en tanto que Oriol Serviá, cuya reincorporación a Schmidt Peterson Motorsports hace cinco días, concluyó en 19º. En la última de las siete horas de acción, Jordan King ocupó el 26º sitio y Ben Hanley el 27º. Para los británicos de Rahal Letterman y DragonSpeed, será su primera aparición en el evento.
En contraste, casi todos los pilotos que protagonizaron accidentes en la semana vieron condenadas sus posibilidades de asegurar su entrada a la carrera. El mejor de ellos fue Felix Rosenqvist, quien apenas terminó en 29º gracias a un intento final que le aseguró permanecer en el Top 30.
A pesar de salir cinco veces a pista, Fernando Alonso no pudo encontrar la velocidad en su McLaren de reserva; aunque entró a la zona segura en ocasiones múltiples, eventualmente fue sacado por JR Hildebrand, el penúltimo coche en aparecer en pista, quien con un turno excepcional subió a la 21º casilla.
Patricio O’Ward también ha batallado con su monoplaza de repuesto, que en principio es uno que su coequipero Max Chilton manejó en eventos de circuito permanente. Aunque a una hora del final superó a 1h15m del final, una recalificación lo vio hacer un promedio más bajo, aunque no iba a ser suficiente para permanecer en 30º posición.
James Hinchcliffe protagonizó el accidente más aparatoso del día, al perder el control de su auto en la curva 2 en su salida original y destruir su coche principal. Aunque Schmidt Peterson armó su máquina de repuesto, al no tener kilometraje, no encontró la puesta a punto en sus tres intentos de calificación.
El mismo Chilton, junto con Sage Karam, quien rozó el muro en su primer intento y jamás encontró la velocidad, y Kyle Kaiser, en el auto de reserva de Juncos Racing, tampoco entraron a la carrera provisionalmente. Los cinco protagonizarán una “muerte súbita” para ocupar las últimas tres casillas de la parrilla de salida, sea el domingo o, si llueve, el lunes o martes.
De destacar que el desarrollo de la calificación, que vio las mejoras de Hanley, Hildebrand y Rosenqvist, dejó a Pippa Mann en 30º colocación, lo que marca su regreso a la Indy 500 tras quedar fuera en 2018.
Las actividades comenzarán este domingo a las 10:15 AM (Hora Local) con entrenamientos, seguido de la lucha por la última fila desde las 12:15 hrs.
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